Llevo varios meses trabajando en un nuevo proyecto y no había caído en que no le he hablado de ello a casi nadie. Leyendo uno de los muchos libros con los que ando últimamente, de repente he pensado que, en lugar de esperar al resultado final, podría ser divertido ir mostrando el proceso.
Cada día tengo más claro que la única manera de conocernos bien a nosotros mismos y lo que hacemos es a través de los demás. No me malinterpretéis, no se trata de ser un esclavo de opiniones ajenas sino de hacer el ejercicio de observar el mundo a través de otros ojos, eso da mucha perspectiva. A menudo cuando estoy hablando con cualquier persona, además de escucharla con atención (debido principalmente a mi infinita curiosidad), lo que oigo me devuelve constantemente a mí mismo. Me recuerda cosas de mí, de cómo soy ahora, de cómo era antes, de algo que he vivido. Eso hace que la interacción con los demás me resulte tan entretenida y estimulante. La vida no va de guardar secretos sino de compartir y aprender y vivimos en una época maravillosa para ello.
El caso es que la fotografía me apasiona, pero lo hace porque me parece un instrumento magnífico para llegar a nosotros y a los demás (algo he escrito sobre ello antes). Eso me hizo reflexionar acerca de qué es realmente lo que me interesa de la fotografía. Puede parecer que tiene una respuesta sencilla, pero es una pregunta trampa. No sé si lo probáis a menudo, pero preguntarse el por qué hacemos lo que hacemos, el sentido profundo, es bastante inquietante a menudo porque lleva a la acción.
Al poco de darle vueltas vi claro que lo que me interesan son las personas y las emociones. Disfruto infinito con esas dos cosas y me hacen sentir vivo. Entonces me puse a repasar mentalmente los libros, cursos, conferencias y exposiciones fotográficas o artísticas que he conocido y me di cuenta de que muy pocas hablaban del sentido emocional de todo eso. De cómo nos hace “vibrar” ! y pensé… voy a hacer algo donde poder centrarme en ello !
En la siguiente entrada voy a ir contando más que sino me alargo y no acabo nunca…
